El ser humano es un animal de costumbres, le gusta sentirse seguro en un entorno conocido y poder predecir como será el siguiente día. La rutina manda en nuestras vidas con pequeños cambios que intentamos controlar. Desde que los videojuegos llegaron a nuestras vidas, una tranquila, hermosa y cíclica rutina nos ha hecho estar tranquilos y seguros: Adquiríamos plataformas “último modelo”, se hacían obsoletas, adquiríamos nuevas plataformas “último modelo”.
Así ha sido generación tras generación en nuestro pequeño y querido mundo de los videojuegos, pero poco a poco, en los últimos años, una nueva realidad se ha hecho más que evidente: los videojuegos ya no son el pequeño mundo del que nos sentíamos los amos y señores, la industria ha logrado llegar a todos los sectores de la población, convirtiendo nuestro hobby, en un gigantesco mercado. Las circunstancias han cambiado señores y como es normal, este hecho cambiará el hasta ahora apacible modelo de mercado… Bienvenidos a un mundo donde diferentes generaciones de consolas conviven entre sí, bienvenidos a un futuro no tan lejano.