La nueva generación de consolas ha puesto el listón muy alto, la competencia ha provocado tal desarrollo en la tecnología destinada al ocio que las diferencias son mínimas entre las plataformas más potentes. ¿Mínimas?
Si si… Mínimas. En multitud de webs y foros podemos encontrar comentarios poniendo el grito en el cielo porque la versión de su consola tiene un framerate inferior a la de la competencia o porque las texturas se ven mucho mejor en el PC que en consolas. Para todos los que penséis que las conversiones del PC dejan por los suelos a la XBOX 360, o que vuestra PS3 supera a toda la competencia, os invito a recordar como eran antes las conversiones entre sistemas… A ver quien se sigue quejando.
Los videojuegos han evolucionado generación tras generación, mejorando año tras año, hemos llegado a un punto en el cual tendemos a buscar las diferencias en vez de limitarnos sencillamente a disfrutar de un juego. Si años atrás las diferencias entre conversiones se limitaban a contar el número de colores, comparar el tamaño de sprites o hacer rabiar a tu compañero porque tu versión contaba con más planos de scroll, hoy en día parece que a cualquier chaval le han regalado la ingeniería en telecomunicaciones en el instituto.
En muchas ocasiones, podemos ver en diferentes webs comparativas de gráficos entre distintas versiones de un mismo juego, dichos artículos suelen abrir la temporada de caza entre los seguidores de las plataformas… Que si en la “pley” el pelo no esta bien definido, que si en la 360 el movimiento no es tan fluido, que si la línea del horizonte es más amplia en PC… Señoras y señores, demos una vuelta por los 80’, el fantasma del pasado viene a visitarnos con la esperanza de que aprendamos la moraleja, abrid vuestras mentes:
Ghosts ‘N Goblins, Amstrad CPC vs Commodore 64
Golden Axe, Atari ST vs PC-Dos
Donkey Kong, Atari 2600 vs Colecovision
Double Dragon, Lynx vs Game Boy
R-Type, MSX vs Spectrum
Wonder Boy, Spectrum vs Amstrad CPC
Shinobi, NES vs Master System
The Simpsons: Bart vs. the Space Mutants, Commodore 64 vs Amiga
Como habéis podido observar, en el pasado las cosas no eran como ahora. Para empezar la oferta de plataformas era mucho más amplia, en un mismo periodo de tiempo, compartían el mismo mercado muchas más plataformas que en la actualidad.
Si hoy en día la máxima diferencia la podemos encontrar entre la todavía activa PS2 y las consolas de última generación, en el pasado llegaron a convivir comercialmente hablando sistemas con grandes diferencias técnicas. A lo largo de los años hemos sido testigos de cómo toda esa variedad de sistemas ha ido mermando, quedando en el mercado el PC como indiscutible vencedor de los ordenadores y unas pocas consolas que se reparten la mayor parte del mercado.
Dejando a la Wii y PS2 de un lado, hemos llegado a un punto en el que las diferencias entre PC, PS3 y XBOX 360 son mínimas en comparación con el pasado, y contra todo pronostico nunca antes se había dado tanta importancia a los pequeños detalles que diferencian las conversiones entre sistemas. Cuando la industria consigue mantener un listón de calidad alto en los tres sistemas, los medios y su público se enzarzan en una batalla sobre que versión tiene “mejores texturas”.
Las imágenes que habéis visto arriba, son comparaciones entre sistemas que convivieron de una forma activa en el mercado en un mismo periodo de tiempo. Cada plataforma tenía sus restricciones a nivel técnico, pero eso no suponía un problema a la hora de disfrutar un videojuego. Si un chaval se compraba su cinta de toda la vida para el Spectrum, sabia perfectamente que la versión de MSX o Commodore 64 serian probablemente muy superiores a la suya técnicamente hablando, pero eso no era un problema.
Si hoy en día las diferencias entre conversiones fuesen como las que habéis visto en los sistemas de antaño, más de un fanboy de despedía de todos en el puente más cercano a su casa… Mirando hacia atrás, vemos como lo que antes se consideraba anecdótico, ya que todo el mundo era consciente de las limitaciones de su sistema, se ha ido convirtiendo con los años en pecado capital.
Cuanto más se han ido asemejando las plataformas, más importancia se le ha ido dando a las comparaciones entre versiones. Dicho de otra forma, cuanto más se han parecido las conversiones, más nos hemos fijado en las diferencias. Siendo conscientes de esto, considero que mejor es que demos una vuelta de nuevo por el pasado, recordemos lo que disfrutábamos antes con cuatro sprites moviéndose por una pantalla estática, y apliquemos la misma formula al presente: Disfrutemos de cada juego en nuestra consola u ordenador y dejémonos de tonterías.
Yo estoy absolutamente convencido de que cualquier tiempo pasado fue mejor. Era muy común tener amigos cada uno con un sistema distinto, en mi caso yo tenía un MSX, y amigos míos tenían un Amstrad y Spectrum respectivamente y jamás discutíamos sobre cuál era mejor o tenía la mejor versión. Sencillamente quedábamos cada semana en casa de cada uno por turno y jugábamos con los juegos favoritos de cada sistema. La compra de uno u otro ordenador la habíamos hecho por una opción personal (y económica) y no por los fanatismos que ahora se aprecian entre niñatos fanboys que se iniciaron en este mundo con una PS2 y ya creen saberlo todo sobre el sector. En aquellos tiempos, los dorados 80, las plataformas convivían y con ellas sus jugadores en un ambiente de camaradería sin igual.
Ahora sin embargo hay un estúpido afán por ver «quien la tiene más grande» en cuestiones de procesador y tarjeta gráfica, cuando Wii es la prueba feaciente de que lo más importante no es la potencia sino la jugabilidad que se exprima con la misma.
Y eso por no hablar de los juegos actuales con unas texturas del copón y demás virguerías pero con una jugabilidad escasa y con menos carisma que un inspector de hacienda, mientras que entonces teníamos juegazos como los mencionados en las capturas con los que nos viciábamos de un modo del que ya quisieran presumir muchos videojuegos actuales.
Allá cada cual, a mí hace tiempo que la actualidad del sector me ha desencantado tanto por lo comentado en este artículo como por otros factores que sería muy largo relatar y por eso prefiero seguir jugando con juegos eternos de NES, MSX, MegaDrive y demás plataformas pasadas vía emuladores, donde cada juego era un alarde de imaginación y no un simple sacacuartos como lo son ahora.
Saludos 😉
El problema con las conversiones es que no dejan de ser eso, conversiones. Algunas se colocan a la altura del original, pero lo interesante es probar el juego en el sistema para el que fue conbebido primeramente.
Bien es cierto que antes quizá nos quejábamos menos. Yo tenía la versión para NES de la recreativa de las Tortugas Ninja y me lo pasaba pipa con ella, a pesar de que técnicamente ni se acercaba a la máquina, y los sprites parpadeaban más que un hamster aquejado de conjuntivitis.
En fin, será cosa de Internet.
Pues yo siempre he dicho que el objetivo de los video juegos es: divertir y entretener sin importar las graficas.
Hoy en dia (salvo Nintendo) las compañias solo se preocupan por ofrrecer buenas graficas dejando de lado el gameplay diversion y demas, recuerdo la espoca del NES,SEGA MASTER SYSTEM,SNES, SEGA GENESIS, GAME GEAR Y GAMEBOY, en la que los programadores se esforzavan por darnos un buen juego sin improtar las graficas.
Bueno tomando el tema de las conversiones, recuerdo que yo tenai el Ms. Pac-Man de Atari 2600 que aunque no era igualito (graficamente) al de Arcade me entretenia mucho y me podia gastar hasta 20 pesos (de ese entonces) en dicho juego pues mantenia la escencia del juego que es lo que realmente importa.