Primera generación de consolas | 100% RETRO

La primera generación de consolas de videojuegos es, sin lugar a dudas, la generación más importante de la historia de los videojuegos, sin las consolas que la protagonizaron y sus videojuegos, nada de lo que conocemos hubiese sido posible. Iniciada con la Magnavox Odyssey en 1972 en Estados Unidos, con el lanzamiento de la primera consola se inició una andadura que llegaría a convertirse en la industria del ocio más rentable de la historia.

FECHA DE INICIO: 1972
PRIMERA CONSOLA:
Magnavox Odyssey

  1. Consolas de la primera generación en Infoconsolas.
  2. La primera generación de consolas, antecedentes.
  3. La primera generación de consolas, transcurso.
  4. La primera generación de consolas, legado y consecuencias.
  5. El público de la primera generación de consolas.
  6. Los juegos de la primera generación.
  7. Coleccionar consolas de la primera generación.
  8. Comprar consolas de la primera generación.
  9. FAQ Primera generación de consolas de videojuegos

Consolas analizadas en Infoconsolas.

Aquí están las consolas que tenemos analizadas de la colección de Infoconsolas, poco a poco iremos actualizándolas y añadiendo nuevos sistemas que todavía no hemos subido a la web. Si os habéis quedado con ganas de más, ¡aquí tenéis retro puro y duro!

La primera generación de consolas, antecedentes.

La historia de los videojuegos se remonta a los periodos de conflicto en la segunda guerra mundial, grandes ordenadores destinados a descifrar mensajes del enemigo o a calcular los primeros ensayos balísticos virtuales, sentaron las bases para que la las matemáticas, ingeniería y la necesidad de supervivencia, evolucionasen aquellas gigantescas máquinas llamadas ordenadores, hasta consolidarlas como una herramienta imprescindible para cualquier nación que mirase al futuro.

La segunda guerra mundial acabó y debido al fin de la guerra, en la que el mundo se asombró ante del devastador poder de la ciencia y su bomba atómica, todo lo relacionado con la ciencia sufrió un considerable desprestigio entre la población, siendo especialmente importante en el caso que nos ocupa lo acontecido en Estados Unidos. Al ser conscientes de la necesidad de ganar una carrera, la armamentística en plena guerra fría vinculada más que nunca a los nuevos ordenadores, en un momento en el que la ciudadanía rechazaba por miedo todo lo relacionado con la ciencia, con las consecuentes dificultades que eso entrañaba para dotar económicamente las correspondientes partidas, el gobierno norte americano inició una campaña de limpieza de imagen de todo lo relacionado con la ciencia, y con lo nuclear. De repente, los científicos eran seres entrañables y en pocos años todos tendríamos un coche a reacción nuclear en nuestros hogares, ese era el futuro que nos vendían…

De esta forma, los laboratorios estadounidenses se abrieron a la ciudadanía y dejaron de ser oscuros secretos para convertirse -en parte- en una atracción para todos los públicos con visitas y ferias dedicadas. Y como cualquier atracción que se precie, los niños necesitaba una diversión, un juego, ese juego llegó en forma de Tennis for Two en un osciloscopio (1958), toda una maravilla tecnológica que encandiló a grandes y pequeños. Anteriormente las naciones y grandes corporaciones ya habían construido ordenadores que eran capaces de ejecutar juegos como el OXO o el NIM como muestras de los progresos en IA, pero el gran público no había tenido acceso a estos sistemas, el Tennis for Two fue el primer destello de los videojuegos tal y como los conocemos hoy en día.

Posteriormente en los años 60′, los ordenadores abaratarían sus costes de producción y llegarían a más universidades y por ende, a más estudiantes, el combo perfecto para la creación del primer videojuego de la historia en un ordenador, estamos hablando del Spacewar! corriendo en un PDP-1 en el MIT de la mano de Steve Rusell. La chispa se había encendido y de unos inicios militares, los videojuegos habían dado el salto a los civil estando enmarcados aún en un entorno exclusivamente universitario. Siguiendo en el entorno universitario nos encontramos en septiembre de 1971, con la primera recreativa de la historia, el Galaxy Game, una evolución del Spacewar! que había saltado de campus en campus llegando hasta Stanford, lugar donde se instalo en la cafetería de la universidad a 10 céntimos la partida. En su interior había un PDP-11/20 y a pesar de haber tenido la gran idea del siglo, sus creadores no supieron escalar un modelo de negocio que años más tarde conquistaría el mundo, los recreativos. En su contra, las recreativas perduraron en el campus con diferentes mejoras hasta 1979, quedando limitadas al uso de los estudiantes universitarios.

Y es llegados a este punto, donde entra en acción el archiconocido Nolan Bushnell, fundador de Atari y su «segunda recreativa de la historia», con el videojuego Computer Space, otra evolución del Spacewar! corriendo en un hardware dedicado mucho más barato que un ordenador de la época, insertado en un lustroso y futurista cabinet y lo más importante, distribuido en los lugares más cotidianos y concurridos, es decir, bares, restaurantes y cafeterías entre muchos otros. Nolan Bushnell tuvo la visión de ver el potencial de los videojuegos como maquinas recreativas. Anteriormente Estados Unidos estaba lleno de gramolas, pinball y recreativas mecánicas, Nolan fue capaz de crear crear un nuevo mercado virgen paralelo, el de las recreativas de videojuegos. El futuro llegaba a las manos del pueblo.

Con 1.500 unidades fabricadas. la Computer Space fallaba en los controles y en ser un juego demasiado difícil para quien no había tocado nunca un videojuego, pero Nolan aprendió de la experiencia y se pondría a trabajar en una nueva creación al alcance de todos los públicos a través de una nueva recreativa, ahora ya sí, con su recién fundada Atari.

Pasamos ya a la primera consola de la historia, pero si os habéis quedado con ganas de más, aquí tenéis: historia de los videojuegos, los inicios.

La 1ª gen. de consolas, el Pong.

Mientras diferentes personas habían tenido el enfoque similar de acercar los videojuegos al gran público mediante las máquinas recreativas, el ingeniero Ralph H. Baer, conocido como el padre de los videojuegos, estaba trabajando en un concepto inicial completamente distinto: Introducir los videojuegos en nuestros televisores, pudiendo jugar desde casa seleccionando su canal… ¡Un adelantado a su tiempo!

Con la idea de crear una «televisión interactiva» desde 1951, no fue hasta 1969 cuando tuvo terminado su séptimo y definitivo prototipo: «The brown box«, la caja marrón. Después de varias rondas, Magnavox fue la compañía que se interesó realmente y decidió fabricar la que seria la primera consola de de videojuegos de la historia, la Magnavox Odyssey. La Magnavox Odyssey era una maquina compuesta por 40 transistores y 40 diodos, sin chips o CPU, contaba con dos mandos, tarjetas para cambiar de juegos, un rifle como periférico y unos overlay, que se ponían en las pantalla de nuestros televisores para dotar al juego de un contexto y gráficos. A estos componentes más o menos comunes, los juegos venían acompañados de fichas, tarjetas y billetes como los del monopoly entre otros, ya que lejos de lo que muchos puedan imaginar, la primera consola de la historia tenia, gracias a estos complementos propios de los juegos de mesa, videojuegos de geografía, disparos, pilla pilla, estrategia… Y el Table Tennis, o Ping Pong.

El Ping Pong o directamente, Pong, fue el juego que monopolizó la consola y por ende, los videojuegos, su extrema sencillez y adictividad enganchó a todo aquel que lo probaba, siendo además un juego que no necesitaba overlay e ideado para dos jugadores, por lo que se convirtió en el rey indiscutible de la consola. El resultado del tremendo éxito que cosechó el juego (que no consola), se tradujo en multitud de consolas y recreativas que emulaban el juego, siendo los casos más conocidos los de Atari y su recreativa Pong, así como su consola lanzada en 1975, la Atari Pong. Como es de esperar, Magnavox inició una serie de litigios ante todas las marcas que no pagaban por su licencia del Pong y los videojuegos.

Como hemos dicho, la Magnavox Odyssey encendió la mecha y muchas otras marcas la siguieron, el mercado se llenó de consolas que ofrecían variantes del Pong, iniciándose una carrera tecnológica para abaratar los coses, que pasó de lo analógico, a los primeros chips integrados como la Atari Pong, y posteriormente el uso estandarizado de los archipopulares General Instruments AY-3-8500, chips especializados en PONG que ya tenían predefinidos los juegos, pudiendo cambiar diferentes variantes como la velocidad y demás cada fabricante. En realidad, los cientos de consolas tipo Pong que salieron en los años 70, tenían prácticamente los mismos juegos, siendo todos ellos variantes del Pong, ya se llamase Soccer, Squash, Tennis o vóley. Únicamente honrosas excepciones como los primeros Break Out (posteriormente conocido como Arkanoid) que evolucionaron del Pong creando un propio genero, y los juegos de rifles, ofrecieron variedad al público.

Para que os hagáis una idea de hasta que punto el fenómeno Pong llegó a triunfar en la 1ª generación de consolas de videojuegos, sólo la marca Atari, llegó a lanzar más de 20 consolas tipo Pong, ahora sumemos todas las marcas que se apuntaron a la moda de los videojuegos como Coleco, Nintendo, Philips, Zanussi, Epoch, Interton, TRQ, Bentley, Conic, Bianchi, Bandai, Commodore, APF, más todas las consolas clónicas y piratas de Hong Kong y como resultado tendremos una completa saturación del mercado de los videojuegos.

Multitud de marcas entraron a la vez en el mercado de los videojuegos, sin dar tiempo a que creciese lo suficiente en usuarios de base como para absorber toda la oferta. Con cientos de consolas ofreciendo prácticamente los mismos juegos, centrándose las marcas en aquellos países en los que tenían más autoridad y acceso, la batalla que se libró fue encarnizada. Lo que había surgido como tecnología punta, no tardo en abaratar su precio hasta ser productos asequibles para las clases medias. Aún así, una vez que una familia adquiría una consola de primera generación, pocos motivos tenia para comprar otra consola Pong, por lo que en pocos años el mercado se copó y ralentizo, haciendo que la inmensa mayoría de compañías que se habían apuntado a la moda de los videojuegos, no volviesen a lanzar nuevas consolas en las posteriores generaciones.

Por si no había quedado claro, la 1ª generación de consolas de videojuegos fue PONG, PONG, PONG y más PONG.

Atari Pong

La 1ª generación de consolas, legado y consecuencias.

En muy pocos años las consolas de videojuegos fueron capaces de crear un nuevo entretenimiento, afición, hobby, mercado, industria y pasión. El boom de los videojuegos había estallado y había traspasado fronteras y generaciones. Un producto lanzado en 1972 en Estados Unidos, se multiplicó y conquistó el globo pasando por todos lo continentes. Fabricantes de todos los países se animaron y lanzaron sus propias consolas, llevando el fenómeno de los videojuegos a todo el mundo. Y no, no pensemos sólo en Japón o Alemania, consolas de fabricación española como la TRQ u Overkal (1973), nos trajeron los videojuegos a nuestras fronteras en unos años en los que ni había internet, ni globalización tal y como la conocemos hoy en día.

La primera generación de consolas conquistó el mundo y demostró que una industria de nueva creación, era viable y tenía un gran potencial. A esos visionarios les debemos todo lo que tenemos hoy en día, por lo que tendremos siempre una deuda pendiente con ellos.

El público de la primera generación de consolas.

¿Quien compraba las primeras consolas? ¿A qué público estaban dirigidos los primeros videojuegos? En los primeros años, además de las consolas, los videojuegos se desarrollaron principalmente en las maquinas arcade paralelamente, siendo estas maquinas más potentes y costosas, su modelo de negocio era el de colocar unidades en locales muy concurridos, para que muchas personas jugasen a una única maquina a un costo muy reducido (unos pocos céntimos). Este modelo, el de las maquinas arcade, supuso un enorme éxito y negocio, contribuyendo en mayor medida que las consolas a popularizar a los videojuegos.

De esta forma, los videojuegos pudieron abarcar un público mucho más amplio: En las tabernas y bares, las recreativas ofrecían a los jóvenes y adolescentes con poco poder adquisitivo, partidas a pocos céntimos y, para esos padres de familia que trabajaban y no tenían tiempo de irse de bares, las consolas eran un nuevo entretenimiento perfecto para disfrutar con la familia.

En consecuencia, las primeras consolas de videojuegos iban destinadas a persuadir a las personas que en los años 70′, tenían el poder adquisitivo suficiente para invertir 100 dólares en un nuevo aparato tecnológico, es decir, los cabeza de familia que trabajaban. Hoy en día puede sonar arcaico, pero es que estamos hablando de la sociedad en los años 70′, es suficiente ver un par de anuncios de las consolas de esos años, para corroborar lo dicho.

Evidentemente, que la persona que ejecutase la compra fuese el padre de familia, no excluía al resto de la familia como beneficiarios e interesados en las consolas de videojuegos, todo lo contrario, la primera generación de videojuegos estaba planeada para ser disfrutada en familia y los niños eran el cebo perfecto para todos los publicistas. De hecho al ser el mercado norte americano el referente de la primera generación, las consolas se adaptaron en muy poco tiempo lanzando sistemas para familias numerosas de 4 o incluso más jugadores.

Los juegos de la primera generación.

La primera generación fue PON: En sus mil variantes, con más o menos definición, con mandos en la propia consola o individuales, en blanco y negro las primeras o en color las últimas consolas… Pong al fin y al cabo. Salvo algunas excepciones como los juegos de rifle, los Break Out y los primeros intentos de la Magnavox Odyssey de diversificación de juegos, una nueva industria centró una elaborada propuesta única de éxito demostrado a un nuevo mercado cuyo tamaño se definía a diario, creciendo hasta límites que pocos imaginaban en el comienzo.

Hasta tal punto el Pong y sus variantes eran importantes, que las propias consolas estaban totalmente dedicadas a estos juegos mediante sus mandos, siendo lo habitual que tuviesen una o varias ruedas para manejar la dirección de la pala y el efecto de la bola, estando los botones de menú y selección de videojuego en la propia consola. No hacía falta nada más.

Respecto a los formatos como ya hemos dicho, salvo honrosa excepciones como la Odyssey y sus tarjetas, eran consolas dedicadas por lo que no tenían ni cartuchos, ni cintas ni nada, todos los juegos estaban incorporados en la propia consola.

Primera generación de consolas

Coleccionar consolas de la primera generación.

Resulta curioso como el factor nostalgia influye tremendamente por encima de otros como el histórico, a la hora de escoger si adquirimos una consola u otra para nuestra colección. Nadie duda en comprar una Super Nintendo de 16 bits, pero pocos buscan una Atari Pong o consolas similares de primera generación. Está bien, es normal, pero para todos aquellos que dan un paso más allá en su afición y pasión por los videojuegos, una vez ya cubiertas aquellas consolas de nuestra niñez y recuerdos, las consolas de primera generación son un elemento imprescindible en cualquier colección que se precie.

Imaginaos que una videoteca se parase en los Goonies, que una colección de vinilos no pasase más allá de Tino Casals sin llegar a los Beatles, que en un museo solo llegasen hasta el medievo obviando a Grecia, Roma, Egipto… Impensable, ¿verdad? Pues eso mismo es lo que pasa en la mayoría de colecciones de aficionados y amantes de los videojuegos.

Desde Infoconsolas somos perfectamente conscientes que la primera generación de consolas no es tan rejugable como las generaciones posteriores, ni os traerán gratos recuerdos a la mayoría, porque sencillamente no habíamos nacido la mayoría, pero la primera generación de consolas es Historia con mayúsculas, tenemos la posibilidad de tener en nuestras manos una Era transcendental de este hobby y cultura que nos ocupa, algo inaccesible en otras ramas como la pintura o el cine, aún cuando sólo sea por el valor histórico. ¿Cómo no preservar esta generación de consolas? Debería ser nuestro deber como coleccionistas de videojuegos tener como mínimo, una parte representativa de esta primera generación.

Comprar consolas de la primera generación.

Afortunadamente para nosotros, salvo las consolas más populares de la primera generación, podemos afirmar que la mayoría de consolas tipo Pong tienen unos precios muy asequibles. El hecho de tener un factor nostálgico muy inferior en comparación a las generaciones posteriores en las que ya había un mayor número de jugadores, sumado a la saturación de diferentes sistemas muy similares en pocos años, hace que exista una gran oferta de consolas en webs especializadas.

En consecuencia, por menos de 20 euros podemos tener una consola de principios de los años 70 en nuestra estantería, no está nada mal, ¿verdad?. Respecto a consolas como la Atari Pong de Sears o la Magnavox Odyssey, al ser autenticas piezas de museo cuestan una cantidad elevada, pero aún así inferior al precio de otras consolas como por ejemplo la Neo Geo.

comprar consolas

Sea como sea, una vez más en nuestro amado hobby nos tocará bucear por las webs de eBay buscando esa consola que nos resulte interesante. Como ya hemos dicho, aunque sea para tener en la estantería, cualquier colección de consolas debería tener una o varias representantes de esta generación. Para entender el presente, hay que conocer el pasado.

FAQ Primera generación de consolas y videojuegos retro

¿En qué año empieza la primera generación de consolas?

1972.

¿Cuál fue la primera consola de la primera generación?

Magnavox Odyssey.

¿Quién inventó la Magnavox Odyssey?

Ralph H. Baer.

¿En qué país se inició la primera generación de consolas?

En Estados Unidos de América.

¿Qué juegos caracterizan la primera generación de consolas?

Pong y sus variantes y juegos de rifle o pistola.

¿Cuál fue la consola más vendida?

La Atari Pong en sus diferentes versiones.

¿Qué formato tenían los juegos de la primera generación?

En su mayoría venían integrados en la consola, a excepción de la Magnavox Odyssey que utilizaba tarjetas.

¿A qué público iban destinadas las primeras consolas?

Al familiar, con el cabeza de familia como comprador.

Fuentes y enlaces externos